jueves, 5 de diciembre de 2013

Textos literarios para la Educación Emocional. Capítulo 2


2.-Aprender en la escuela con maestros que ponen todo su corazón.

Orientación didáctica

Siempre ha habido muchos tipos de escuela, países donde apenas existen, y niños que no pueden disfrutar de la educación por diversos motivos. A partir de la noticia de cómo se crean escuelas en Asia, o del texto de Pablo Neruda que habla de las inundaciones que no impiden acudir a aprender,  reflexionaremos sobre la gran suerte que supone no tener que luchar por una educación que ya se ofrece de forma gratuita por el mero hecho de nacer en un país determinado o tener medios que nos permiten salvar todos los contratiempos. A continuación, se hablará sobre distintos tipos de profesores y su forma de abordar la enseñanza o los conflictos que puedan surgir en el centro.
UNICEF lanza Escuelas para Asia
UNICEF lanza hoy Escuelas para Asia, una iniciativa internacional de recaudación de fondos para mejorar el acceso y la calidad de la educación para los niños desfavorecidos que viven en Asia y el Pacífico. Cuenta con el apoyo de la Embajadora de Buena Voluntad de UNICEF, Serena Williams, que protagoniza un anuncio de interés público emitido hoy.
La campaña Escuelas para Asia ayudará a los niños más marginados, excluidos o vulnerables, incluidas las niñas procedentes de familias pobres y de minorías étnicas. El modelo es sencillo: garantizar que las escuelas funcionan en el interés superior de todos y cada uno de los niños, mediante un profesorado capacitado y un entorno seguro, protector e integrador para los jóvenes alumnos. Estas escuelas acogedoras para la infancia también prosperan para ofrecer mejores recursos e instalaciones, incluida el agua potable y las letrinas separadas para niños y niñas.
La iniciativa operará en Bangladesh, Bhután, China, la India, la República Democrática Popular Lao, Mongolia, Nepal, Papúa Nueva Guinea, Filipinas, Timor y Viet Nam. El objetivo no sólo consiste en proporcionar a los niños unas escuelas mejores y más accesibles, sino también que sigan escolarizados.
Entre los 67 millones de niños en el mundo que actualmente no están matriculados en la escuela, 26 millones viven en la región de Asia y el Pacífico.
Esta campaña sigue a su exitosa homóloga Escuelas para África, lanzada en 2004 en una alianza internacional de recaudación de fondos con las fundaciones Nelson Mandela y Peter Krämer.
Sabine Dolan. Nueva York, EE.UU. 10 de enero de 2012.

Guía de lectura o actividades

A)    ¿Sabías que 67 millones de niños no acudían a la escuela en el mundo? Imagina qué futuro tendrán. ¿No crees que tienes suerte por tener derecho a una educación de calidad?
B)    ¿Conoces la ONG Ajuda Directa Safané que ha creado una escuela en esta ciudad de Burkina Fasso? Algunas fotos de este libro son de niños de allí.
C)    Escribe una carta a uno de esos niños y piensa si podríais apadrinarle entre toda la clase.

Lluvia y escuela

Llovía meses enteros, años enteros. La lluvia caía en hilos como largas agujas de vidrio que se rompían en los techos, o llegaban en olas transparentes contra las ventanas, y cada casa era una nave que difícilmente llegaba a puerto en aquel océano de invierno.
Esta lluvia fría del sur de América no tiene las rachas impulsivas de la lluvia caliente que cae como un látigo y pasa dejando el cielo azul. Por el contrario, la lluvia austral tiene paciencia y continúa, sin término, cayendo desde el cielo gris.
Frente a mi casa, la calle se convirtió en un inmenso mar de lodo. A través de la lluvia veo por la ventana que una carreta se ha empantanado en medio de la calle. Un campesino con manta de Castilla negra, hostiga a los bueyes que no pueden más entre la lluvia y el barro.
Por las veredas, pisando en una piedra y en otra, contra frío y lluvia, andábamos hacia el colegio. Los paraguas se los llevaba el viento. Los impermeables eran caros, los guantes no me gustaban, los zapatos se empapaban. Siempre recordaré los calcetines mojados junto al brasero y muchos zapatos echando vapor, como pequeñas locomotoras. Luego venían las inundaciones, que se llevaban las poblaciones donde vivía la gente más pobe, junto al río.
PABLO NERUDA. Confieso que he vivido.

Guía de lectura o actividades

A)    ¿Te ha sucedido en alguna ocasión que tuvieras que sufrir penalidades para acudir a la escuela? ¿Cómo crees que viven los niños que viven muy lejos de su escuela y no disponen de un automóvil o un autobús para poder desplazarse a diario hasta su centro educativo?
B)    Investiga en internet. Pon la frase: “niños que viven lejos de la escuela” y te saldrá la página  www. unicef.org y algunas más. Resume la información.

Dos profesoras distintas

La escuela para niños del pueblo era un edificio tristón de ladrillo. Albergaba a unos doscientos  cincuenta niños, de edades comprendidas entre cinco y poco menos de doce años. La directora, la jefa, la suprema autoridad de este establecimiento era una dama terrible, de mediana edad, llamada señorita Trunchbull.
A Matilda, como es natural la asignaron a la clase inferior, donde había otros dieciocho niños, aproximadamente de su misma edad. La profesora era la señorita Honey, que no tendría más de veintitrés o veinticuatro años. Tenía un bonito rostro ovalado de madonna, con ojos azules y pelo castaño claro. Era una persona apacible y discreta, que nunca levantaba la voz y a la que raramente se veía sonreír, pero que, sin duda, tenía el don de que la adoraban todos los niños que estaban a su cargo[…]
La señorita Trunchbull, la directora, era totalmente diferente[…] Entró en la clase como una tromba, con sus pantalones verdes y el guardapolvo de algodón. Se fue derecha a su jarra de agua, la levantó cogiéndola por el asa y miró dentro.
_ Me alegra comprobar que esta vez no hay animales viscosos en mi agua. En caso contrario, algo excepcionalmente desagradable les hubiera ocurrido a todos. Y eso la incluye a usted, señorita Honey.
La clase permaneció tensa y en silencio. 
ROALD DAHL. Matilda.

Guía de lectura o actividades

A)    ¿Cómo te imaginas a una directora que habla como la señorita Trunchbull? Haz un dibujo de las dos profesoras que aparecen en el texto anterior y, a continuación, una descripción de su carácter y cualidades para la enseñanza.
B)    Explica a tu tutor cuál sería tu profesor ideal y las cualidades que aprecias en las personas que conviven contigo, reconocen tus cualidades y te hacen sentir bien.

La reputación de un colegio

La superiora subió al estrado.
-Siéntense- ordenó. […]
Las alumnas se sentaron, y a los pocos segundos de apagarse el último eco de su movimiento, la superiora pasó su mirada por encima de las cabezas. Algunas incluso se encogieron al ver la expresión de sus ojos. Casi al instante volvió a escucharse el latigazo de su voz.
-Anoche -comenzó –alguien vio salir a una persona del pabellón dos. Concretamente vio salir a un hombre –dejó que esta matización calara hondo en las muchachas-. No fue posible detenerlo porque era una persona ágil, probablemente muy joven. Saltó el muro sin que se lograra identificarlo. […] No necesito decirles que se ha cometido una falta grave, muy grave, la más grave en los muchos años de existencia de este centro. Y por eso están aquí. Por eso se las ha reunido. No es algo que pueda ignorarse o pasarse por alto. Están en entredicho el buen nombre y la reputación de este colegio –el tono cambió de pronto-. ¡Exijo a la responsable, a la alumna de cuya habitación salía esa persona, que tenga el valor y la honradez de aceptar la culpa dándose a conocer!
Ahora en el silencio que siguió a la andanada final, sí hubo cruces de miradas subrepticias, temerosas. Ojos expectantes, recelosos, la mayoría de miedo, con sorna o ironía los menos, quizás los que no sabían qué iba a pasar a continuación.
JORDI SIERRA I FABRA. La voz interior.
Guía de lectura o actividades
A)    ¿Te parece importante la imagen que tiene la sociedad de los colegios? Explica tu opinión sobre este asunto.
B)    ¿Has sentido miedo de algún profesor a lo largo de tu vida escolar? Recuerda cómo notaste tu cuerpo en esos momentos y cómo te fuiste tranquilizando poco a poco.

Orientación didáctica

El papel de la escuela y los profesores en la sociedad actual

Aprovecharemos el poema “Libertad” que no comprenderán en su totalidad los niños, para recoger las ideas al respecto  de este concepto y oponerlas al de capricho que aparece en el de “Los consejos del tío Dámaso”. Podemos hacer un dictado. Estas nociones son incluso difíciles de aprehender por los adultos y tanto los padres jóvenes como profesionales de todo tipo que no han descubierto cuál es la verdadera libertad, tienen dificultad para deslindarlos y pueden maleducar a hijos o alumnos al confundirlas. Evidentemente, les ayudaremos a no confundir dichas nociones con las de disciplina, discípulo (misma raíz y, por tanto, contenido), reglas o normas de una casa o una escuela, derechos a la salud, respeto a los demás… Si la poesía posee un lenguaje connotativo, aquí se demuestra más que nunca por las ideas tan polémicas que pregona.

Libertad 
Qué hermosa eres, libertad. No hay nada
que te contraste. ¿Qué? Dadme tormento.
Más brilla y en más puro firmamento
libertad en tormento acrisolada.
¿Que no grite? ¿Mordaza hay preparada?
Venid:
amordazad mi pensamiento.
Grito no es vibración de ondas al viento:
grito es conciencia de hombre sublevada.
Qué hermosa eres, libertad. Dios mismo
te vio
lucir, ante el primer abismo
sobre su pecho, solitaria estrella.
Una chispita del volcán ardiente
tomó en su mano. Y te prendió en
mi frente,
libre llama de Dios, libertad bella…
DÁMASO ALONSO

Para el hijito del poeta Luis Rosales
 
Haz lo que tengas gana,
Cristobalito,
lo que te dé la gana,
que es lo sencillo.

Llegaste a un mundo donde
manda la chacha,
mandan los mandamases
y hay poca lacha.

Caso nunca les hagas
a los mayores.
Los consejos de Dámaso
son los mejores.

Tira, mi niño, tira,
si te da gana,
los libros de papito
por la ventana.

Cuélgate de las lámparas
y los manteles,
rompe a mamita el vaso
de los claveles.

¿Qué hay pelotón de goma?
Chuta e impacta.
¡Duro con la pintura
llamada abstracta!

[…]Vamos a divertirnos
tú y yo, mi cielo.
Es un asco este mundo:
conviene que lo
pongamos boca abajo.
¡Es tan sencillo!
Vamos a hacer un mundo
nuevo, chiquillo.
DÁMASO ALONSO


Orientación didáctica

Si el profesor que atiende a los alumnos del Aula de convivencia o el tutor es, además, profesional de la literatura, la tarea y trabajo para el alumno se incrementará o multiplicará dependiendo del curso o las ganas que tenga de repasar contenidos del curriculum de la asignatura o  la vida de los escritores que más les interesen. Si se ha despertado el afán de aprender con la poesía, el tiempo se quedará corto para profundizar en todo lo que la rodea.  Es muy importante la Poesía en la Escuela y el aprender a apreciarla desde los más cortos años, unida al canto y a la música en muchas ocasiones.
Casi todos tenemos recuerdos de nuestros primeros años en ese sentido. Leíamos poesías, nos dictaban poesías, memorizábamos poesías, cantábamos poesías…Toca el turno  de recordar. Lo hicieron nuestros antepasados que, de esa forma, nos pudieron transmitir ese amor por el canto, el cuento o la palabra hecha poesía. Si al adolescente lo que le aburre es precisamente eso, dejaremos que se explaye, que comunique lo que siente, que se vacíe… La libertad será total para que pueda ser creativo dibujando, garabateando o pintando, hablando o cantando, haciendo ruido o música, dramatizando o expresando libremente su malestar con un cojín o una toalla; los puñetazos, golpes o gritos de esa guisa no harán daño a nadie y le liberarán de la rabia contenida… Cuando ya esté más tranquilo, será momento para que el profesor recite o lea  y cante;  le puede facilitar el poema que se ajuste más a sus deseos para que pueda leerlo con calma o escucharlo en internet, pues hay tantas y tantas poesías recitadas y canciones  para elegir… Se trabajará entonces el tono de la voz.
Este manual puede aportar material literario con alto contenido emocional relacionado con otros temas a distintos profesores para que aborden con todo el grupo temas del área que imparten, no sólo al de Música, Dibujo-Plástica-Pintura o Educación física, también al de Geofrafía e Historia, Ciencias Naturales, Física o Química, Informática…

La poesía

Yo cogí a la Poesía de la mano, y la hice entrar en mi escuela.
Aquí -le dije- andarás como en tu propia casa. Nada te ha de faltar. Ni candela, pues un lucero arde siempre entre nosotros; ni flores -tú que tanto las amas-, ni corazón, ni un laúd de luna y de fe para tus canciones...
Y la hice entrar en mi escuela.
Y ya todo se llenó de su gracia sin palabras, de su celeste aliento creador...
Alguien, incomprensivo, murmuraba:
-¿Pero qué dicen a esto los poetas, desde sus . torres de marfil?.. Y los juglares, ¿qué hacen, cruzados de brazos?.. ¿Adónde vamos a parar?..
JUAN BERBEL

Recuerdo infantil

Una tarde parda y fría
de invierno. Los colegiales
estudian. Monotonía
de lluvia tras los cristales.

Es la clase. En un cartel
se representa a Caín
fugitivo, y muerto Abel,
junto a una mancha carmín.
 Con timbre sonoro y hueco
truena el maestro, un anciano
mal vestido, enjuto y seco,
que lleva un libro en la mano.
 Y todo un coro infantil
va cantando la lección:
mil veces ciento, cien mil,
mil veces mil, un millón.
 Una tarde parda y fría
de Invierno. Los colegiales
estudian. Monotonía
de la lluvia en los cristales.
ANTONIO MACHADO

Mariquita

Mariquita, escribe, escribe,
y no dejes de escribir,
y no te olvides que "mayo"
siempre se pone con "y".
Mariquita, lee, lee,
y no dejes de leer,
porque si no las orejas
pronto te van a crecer.
 Mariquita, si eres buena,
los Reyes te traerán
una muñeca muy rubia
con los ojos de cristal,
  […] Mariquita, salta, salta,
y no dejes de saltar;
pareces un saltamonte
con dos trenzas de verdad.
 Quien da, quien da,
al cielo se irá;
quien tiene y no da,
al infierno caerá.
GLORIA FUERTES

Geografía

Pintaba un mapa mi niño,
¡qué color azul de mar!,
¡qué verde tierno en los valles!,
¡qué montes color de pan!
Pintaba un mapa mi niño
de un país... yo no sé cuál.
Vio que el mar era muy grande
y casi se echó a llorar;
¡oh los pobres marineros
sin un puerto do arribar!
[…]Si llegan a pisar tierra,
de andar no se acordarán,
como patos caminando
se burlará la ciudad.
Pero mi niño ahora es bueno
y se pone a dibujar
un collar de islas pequeñas
que ahora acaba de crear.
¡ ya podrán los marineros .
en las islas descansar!
Pintaba un mapa mi niño
de un país, yo no sé cuál!.
 CELIA VIÑAS

Este Picasso es un caso

¡Qué divertido es Picasso!
Es pintor rompecabezas
que al cuerpo rompe en mil piezas
y pone el rostro en los pies.
¡Todo lo pinta al revés!
¡Este Picasso es un caso!
Es un puro disparate.
No es que te hiera o te mate,
pero en lugar de dos cejas
él te pone dos orejas.
¡Vaya caso el de Picasso!
[…]Todo lo tuerce y disloca:
las piernas, brazos y boca.
No es verdad lo que tú ves.
¡Él pinta el mundo al revés!
¡Qué Picasso es este caso!
CARLOS REVIEJO

Niños en calle de barro

“(..)¡Qué nueva sensación iluminaba la luna!
¡Qué inocencia en el aire y la luz qué clara!”
Está lloviendo, serenamente,
sobre el recuerdo.
Almendros, olivos, tierra seca
beben la vida.

Así, gota a gota,
creció la infancia acunada
por voces sin tiempo,
conducida por manos firmes y rudas.

Calles de tierra –barro-,
sonidos nítidos, olores de vida recién creada
                                y rostros cotidianos.
Libertad, sencillez,
crianza en un pueblo
                                    agrícola y alfarero.
Y        aquellos niños
que aprendieron allí valores y juegos,
-primavera honrada y feliz-,
caminan con rumbo cierto
hacia un otoño                     
                     con los frutos que la vida regaló.
       SOLEDAD BENAGES. En el Mas d´En Plana. L´Alcora, plovent, 23 de juliol 2010.


Guía de lectura o actividades

A)    Elige la poesía que prefieras de las seis anteriores y practica la recitación con tu voz y sus múltiples matices. Grábala e intenta reconocer en tu tono la ternura, el enfado, la alegría, el aburrimiento, igual que habrás observado en las voces de los poetas, recitadores o cantantes conocidos.
B)     Haz una segunda elección y dibuja el contenido con el color que creas que se aproxima más a la emoción que sientes.

Orientación didáctica

Después de haber repasado nociones de distintas materias con la poesía y haber observado su especificidad: número de silabas, rimas, figuras de estilo… animaremos a los niños a que escriban algo con rima, con gracia, con sílabas contadas o en prosa poética. Para eso, comenzaremos leyéndoles y explicándoles  los versos de Iriarte, conocidos por todos, que animan, incluso, al que no confía para nada en él mismo. Seguiremos con las rimas de la vida cotidiana de dos personajes característicos: el gordo y el flaco que defienden su perfil y están contentos con el mismo. Continuaremos con Platero que les servirá de ejemplo si tienen una mascota apreciada a la que quieran retratar  o con el poema dedicado a la niña de sus sueños. Si aun así no se atrevieran, intentarán o bien añadir alguna metáfora o comparación al texto en prosa que habla de Carolina o bien hablar de sus sentimientos en relación con la poesía y la dificultad que para ellos entraña embellecer la lengua con diferentes estrategias.

La suerte del principiante o la casualidad

Esta fabulilla/salga bien o mal,/me ha ocurrido ahora/por casualidad./
Cerca de unos prados/ que hay en mi lugar,/pasaba un borrico/ por casualidad./
Una flauta en ellos/ halló, que un zagal/ se dejó olvidada/ por casualidad./
Acercóse a olerla/ el dicho animal,/ y dio un resoplido/ por casualidad./
En la flauta el aire/ se hubo de colar,/y sonó la flauta/ por casualidad./
“!Oh!-dijo el borrico-,/!qué bien sé tocar!/!Y dirán que es mala/ la música asnal!”/
Sin reglas del arte,/ borriquitos hay/ que una vez aciertan/ por casualidad.
TOMÁS DE IRIARTE   

Rimas en la vida diaria

Si llegaba la noche y no sabían qué cenar mantenían esta conversación:
-Gorda Pelotona, soy pequeño y flaco, pero tengo un hambre que mato.
-Yo también, mi Lacleta, me comería una bicicleta.
-¿Qué tenemos de comer?
-Espera que voy a ver... Tenemos tomates, pimientos, pepinos.
-Aquí hay un poco de vino
-Tenemos conejos, helados, filetes.
-¡Qué pelados! ¡Qué rojetes!
-Tenemos pescados, aceites, fiambres.
-No sigas, que me da hambre.
-Lacleta, te voy a hacer unas setas.
-Échales también panceta.
-De segundo...
-De segundo te haré pescado.
 -Lo tenías preparado.
Luego al poeta Lacleta le daba un ataque de risa, porque le hacía mucha gracia su mujer la gorda Pelotona. Y como se reía tanto, se le quitaban las ganas de comer y al final se lo comía todo la gorda Pelotona. Por eso el poeta Lacleta cada día estaba más flaco y la gorda Pelotona, más gorda. (…)
ANDRÉS BARBA. Historia de nadas.

Un burrito famoso y la prosa poética

Platero es pequeño, peludo, suave; tan blando por fuera, que se diría todo de algodón, que no lleva huesos. Sólo los espejos de azabache de sus ojos son duros cual dos escarabajos de cristal negro.
Lo dejo suelto y se va al prado, y acaricia tibiamente con su hocico, rozándolas apenas, las florecillas rosas, celestes y gualdas... Lo llamo dulcemente: "¿Platero?", y viene a mí con un trotecillo alegre que parece que se ríe, en no sé qué cascabeleo ideal...
Come cuanto le doy. Le gustan las naranjas mandarinas, las uvas moscateles, todas de ámbar; los higos morados, con su cristalina gotita de miel...
Es tierno y mimoso igual que un niño, que una niña...; pero fuerte y seco por dentro, como de piedra... Cuando paso sobre él, los domingos, por las últimas callejas del pueblo, los hombres del campo, vestidos de limpio y despaciosos, se quedan mirándolo:
— Tiene acero...
Tiene acero. Acero y plata de luna, al mismo tiempo.
Rosalía tiene quince años
Quince almendros en flor, tus quince años.    
¡Qué blancura el paisaje de tu alma!          
Blanca como la nieve, cual la hoja            
de papel en que escribo: toda blanca.        
                                              
Todo es blanco: año nuevo y álbum nuevo;      
yo escribo para ti blancas palabras.          
Me rodea lo blanco, todo en blanco            
como si fuera en una gran nevada.            
                                              
¡Quince arbolillos tienes, Rosalía!          
Y el viento viene, y los acariciaba...        
Ya nieva el mundo flores, flores, flores;    
ya nieva flores, blancas, blancas, blancas. 
DÁMASO ALONSO 

Un niño tímido y Carolina

En la clase había una niña que se llamaba Carolina Kückelmann. Tenía los ojos oscuros, las cejas oscuras y el pelo castaño oscuro, recogido con un pasador a la derecha de la frente. Y tenía, en la nuca y en el hueco entre las orejas y el cuello, una pelusa que brillaba al sol y, a veces, temblaba un poquito al viento. Cuando se reía, con una risa ronca que sonaba muy bien, alargaba el cuello, echaba atrás la cabeza y casi cerraba los ojos, y toda la cara le resplandecía de alegría. Yo hubiera podido estar siempre mirando aquella cara, y la miraba cuando podía, en clase y en el recreo, pero con disimulo, para que nadie, ni la misma Carolina, lo notara, porque yo era muy tímido.
En mis sueños era menos tímido. Entonces la tomaba de la mano y trepaba a los árboles con ella. Sentado a su lado en una rama, la miraba muy cerquita y le contaba cuentos.
PATRICK SÜSKIND. La historia del señor Sommer.

Joventut

Mirar el món,
crear-lo altra vegada
com quan vint-i- pocs anys
n´eren possibles
per fer revolucions,
canviar la vida
i fer la projecció,
i delerar un temps mai no historiat.
Mirar el temps,
junyir
amb el pasat presents
i obrir la llibertat
sobre el quefer
de cada estona viva.
Caminar
cap a l´espai obert
i el temps no emprat
per ambicions ni dubtes.
VICENT PAU SERRA I FORTUÑO. Del temps i l´esperança. Premio  ALCAP 2009.


Guía de lectura o actividades

A)    Escribe ahora tú una poesía y léesela a tus padres o amigos. ¿Cómo te sientes?
B)     Si no te atreves o te sale mal, escribe en tu diario las dificultades con que te has tropezado.

 Orientación didáctica

Ampliar vocabulario y  dominar los distintos significados de las palabras es fundamental en la vida para hacerse entender y expresar mejor cómo nos sentimos. La enseñanza debe contar con esta premisa para explicar las reglas de funcionamiento de los centros e impartir conocimientos cada vez más complejos de las distintas materias. Reflexionaremos también sobre ellas y las normas no escritas.

Las palabras y las normas no escritas

Las palabras son como las cebollas —dijo—. Cuantas más capas quitas, más significados encuentras. Y cuando empiezas a descubrir la multiplicidad de significados, lo de correcto y falso carece de importancia. Todas las preguntas que tú y Samir habéis planteado sobre los harenes están muy bien, pero siempre quedará más por descubrir. Ahora quitaré otra capa para ti —añadió luego—. Pero recuerda que sólo es una entre las demás.
Me dijo que la palabra «harén» era una ligera variación de la palabra haram, lo prohibido, lo proscrito. Que era lo contrario de halal, lo permitido. Harén era el lugar en que un hombre alojaba a su familia, a su esposa o esposas, y a sus hijos y parientes. Podía tratarse de una casa o de una tienda y designaba tanto el espacio como a la gente que vivía en él. Se decía «el harén de Sidi Fulano de Tal» refiriéndose tanto a los miembros de su familia como a la casa propiamente dicha. Me ayudó a comprenderlo mejor el que Yasmina me explicase que La Meca, la ciudad santa, se llamaba también Haram. La Meca era un lugar donde el comportamiento estaba estrictamente codificado. En cuanto uno llegaba a La Meca quedaba sometido a una larga serie de leyes y normas. La gente que entraba en La Meca tenía que ser pura: tenía que realizar ritos de purificación y no podía mentir, engañar ni cometer malas acciones. La ciudad pertenecía a Alá y si se entraba en su territorio había que cumplir su santa ley o shari'a; y lo mismo se aplicaba a un harén cuando se trataba de una casa perteneciente a un hombre. Los demás hombres no podían entrar en ella sin permiso del dueño, y cuando lo hacían tenían que acatar las normas de éste. Un harén se relacionaba con el espacio privado y las normas que lo regían. Y no hacían falta muros, me dijo Yasmina. En cuanto uno sabía que estaba prohibido, llevaba el harén en el interior. Lo tenía en la cabeza,  «grabado bajo la frente y bajo la piel». La idea de un harén invisible, una ley tatuada en la mente, me resultaba de lo más inquietante.
[ …]Eso de andar por ahí con una frontera en la cabeza me inquietó y me llevé discretamente la mano a la frente para comprobar que estaba lisa, sólo para ver si por casualidad estaba libre del harén. Pero entonces la explicación de Yasmina me pareció incluso más alarmante, porque a continuación dijo que todos los espacios en que se entraba tenían normas propias que eran invisibles y uno debía descifrar.
—Y cuando digo «espacio» —continuó—, me refiero a cualquier espacio: un patio, una terraza o una habitación, e incluso la calle, si a eso vamos. Donde hay seres humanos, hay una qa'ida, o norma invisible. Si la respetas, no te pasará nada.
[…]Yo descubrí que muchas veces la gente no entendía lo mismo por la misma palabra, ni siquiera cuando se trataba de cosas aparentemente banales, como los colores. De modo que no era extraño que palabras como «harén» provocaran tanta discordia violenta y discusiones encarnizadas. Fue un gran consuelo saber que los adultos estaban tan confusos como yo acerca de las cosas importantes.
FATEMA MERNISSI. Sueños en el umbral.

Guía de lectura o actividades

A)    ¿Te gusta aprender palabras desconocidas? Estás de acuerdo en que, incluso las que no son nuevas para ti, tienen muchos sentidos o capas como explica Fatema?
B)    Busca en el diccionario el significado de polisemia y monosemia y razona si se puede aplicar a lo que estamos tratando. Escribe  ejemplos de unos tipos de palabras y otras.
C)    Haz una redacción sobre las normas de tu instituto, tanto de las que están claras o son explícitas como de las implícitas.

El coco

No hay materia tan fascinante como la que viene proporcionando la neuropsiquiatría. Ayuda a entender comportamientos que creíamos consecuencia de la cultura. Lo extraordinario es que a menudo esos hallazgos se han esperado con el hacha de guerra levantada. Así lo sabe la doctora Brizendine, neuropsiquiatra, que ha publicado un fascinante libro, El cerebro femenino, recogiendo lo que hasta el momento se sabe sobre el particular. La doctora Brizendine asegura que tuvo reparos al contar que el cerebro de la mujer reduce su tamaño durante el embarazo y no vuelve a su estado anterior hasta seis meses después del parto; así, la naturaleza ayuda a la mujer a concentrarse en sacar adelante a un cachorro tan desprotegido como es el humano, pero esa información podría ser aprovechada por quienes defienden que las mujeres no deben volver a trabajar. La doctora Brizendine sabe que ciertos grupos quieren que la naturaleza les dé la razón y la naturaleza se empeña en seguir sus particulares criterios de sensatez. Por otra parte, nadie puede evitar que la neurología avale ciertos estereotipos, como el de que las mujeres disfrutan hablando. Cuando las adolescentes se reúnen para intercambiar confidencias segregan oxitocina, la hormona de la intimidad. En vez de entender esto a la manera masculina (ellas tienen propensión al cotilleo) o a la manera femenina (la charla era el consuelo de las mujeres) la neurología considera esta afición como la consecuencia de un cerebro que posee una innata capacidad verbal: las mujeres echan mano de unas veinte mil palabras al día y los hombres rondan las siete mil.  ELVIRA LINDO. El coco.  El País, 13-12-2006

Guía de lectura o actividades

A)    Comienza a familiarizarte con el vocabulario científico y define neuropsiquiatría, oxitocina, innato, estereotipo. Busca su origen en un diccionario etimológico y resume el texto.
B)    ¿Sabías que las mujeres disfrutan más que los hombres hablando y manejan más vocabulario?
C)    ¿Por qué crees que este artículo de opinión se titula “el coco”? ¿Qué pretende la escritora al utilizar esta palabra? ¿Es culta? Revisa con tu profesor de literatura las características del lenguaje periodístico.

Orientación didáctica

Y, para seguir motivando,  algo que no se comprenda del todo, el enigma, que deje curso libre a la imaginación o la curiosidad para seguir investigando y pensando en el futuro. Sólo lo invisible a los sentidos nos hace estremecer. Por ejemplo: “El niño que no sabía jugar”, nuestros talentos ocultos o dormidos, escritos sobre el futuro, el hecho de ganar perdiendo y sus consecuencias,  “Los magos del sueño”…


El niño que no sabía jugar

Había un niño que no sabía jugar. La madre le miraba desde la ventana ir y venir por los caminillos de tierra con las manos quietas, como caídas a los dos lados del cuerpo. Al niño, los juguetes de colores chillones, la pelota, tan redonda, y los camiones, con sus ruedecillas, no le gustaban. Los miraba, los tocaba, y luego se iba al jardín, a la tierra sin techo, con sus manitas, pálidas y no muy limpias, pendientes junto al cuerpo como dos extrañas campanillas mudas. La madre miraba inquieta al niño, que iba y venía con una sombra entre los ojos. «Si al niño le gustara jugar yo no tendría frío mirándole ir y venir». Pero el padre decía, con alegría: «No sabe jugar, no es un niño corriente. Es un niño que piensa».
ANA MARÍA MATUTE

El genio oculto

Del salón en el ángulo oscuro,
de su dueña tal vez olvidada,
silenciosa y cubierta de polvo,
veíase el arpa.
¡Cuánta nota dormía en sus cuerdas
como el pájaro duerme en las ramas,
esperando la mano de nieve
que sabe arrancarlas!”
“-¡Ay! -pensé-, ¡cuántas veces el genio
así duerme en el fondo del alma,
y una voz, como Lázaro, espera
que le diga: “Levántate y anda”!
RIMA DE G.A. BÉCQUER

Guía de lectura o actividades

A)    Te imaginas por qué no sabía jugar el niño de la poesía anterior? ¿Te ha sucedido a ti en algún momento? Recuerda si te pusiste nervioso por alguna causa y cuéntaselo a alguien.
B)    ¿Qué cualidades crees que tienes aletargadas o dormidas? ¿Se te ocurre que alguien pudiera ayudarte a que florecieran? Anímate a decírselo.

La llave del tiempo y los recuerdos

—Yo también conozco este lugar —murmuró lentamente—. No lo había visto nunca antes de venir aquí, pero, desde el primer momento en que pisé el bosque, comencé a recordar cosas... O, más bien, quizá, a tener visiones. Visiones que me aterran... y que, sin embargo, son de una belleza increíble.
[…]—¿Es que no entendéis nada? —gritó Selene con voz estridente; luego siguió riendo con una risa que cada vez se parecía más a un llanto histérico y entrecortado, y que se fue calmando lentamente, terminando en una especie de prolongado jadeo que se transformó de pronto en un torrente de palabras—. Esas imágenes... Esas voces... no son visiones, ¡son recuerdos!
Sin comprender, los otros intentaron distinguir en la negrura de la noche los rasgos de la muchacha.
—¿Cómo van a ser recuerdos? —objetó suavemente Martín—. Se trata de cosas irreales, que no hemos vivido...
—¡Claro que no las hemos vivido! Pero las viviremos... Son recuerdos del futuro.
Martín notó que Alejandra se estremecía entre sus brazos. Sintió que la piel se le erizaba debajo de la ropa.
—Eso es imposible —murmuró—. Nadie puede tener recuerdos del futuro...
—A menos que venga de él —dijo Selene, repentinamente tranquila—.  
—Pero yo no tengo esa capacidad, ni Casandra tampoco.
—Quizá cada uno de nosotros esté dotado de unas capacidades distintas; solo es cuestión de ir descubriéndolas.
ANA ALONSO Y JAVIER PELEGRÍN. La llave del tiempo. La torre y la isla.

Guía de lectura o actividades

A)    Habrás observado que aparecen unas contradicciones claras en el texto que acabas de leer. ¿Has pensado y profundizado alguna vez en lo que se dice respecto a tener recuerdos de un tiempo futuro como si hubieras viajado en el tiempo?
B)    ¿Has recapacitado ya sobre tus cualidades innatas para algo en concreto: la música, el dibujo, memorizar, esculpir, escuchar a los demás, imaginar el futuro? ¿Crees que cuando se habla de capacidades que puede uno descubrir, eso tiene que ver sólo con el cerebro y la mente o también con la voluntad de descubrirlas  y de trabajar duro para ejercitarlas?

La cólera y la  máscara

Es evidente que, en nuestras investigaciones, hemos pasado por alto algunas de vuestras capacidades más interesantes... ¿Quién es el genio de la informática que se ha colado en nuestro ordenador y lo ha puesto todo patas arriba? ¿Lo habéis hecho entre todos? Tenéis que explicarme cómo […] A pesar del tono neutro y uniforme que había empleado, no resultaba difícil advertir la intensa cólera que Hiden se esforzaba por dominar, mezclada, eso sí, con una curiosidad no menos intensa acerca del modo en que los chicos habían logrado manipular el ordenador...
Era el momento de intentarlo. Martín lo había planeado mientras corrían casi a oscuras por los túneles de las alcantarillas; la única posibilidad de éxito que les quedaba dependía de él. Si lograba conectar con la mente de Hiden e influir en sus pensamientos, tal vez no todo estuviese perdido. Lo había logrado con otras personas... Sin embargo, había algo en los pensamientos de Hiden que le producía una invencible repugnancia. Por dos veces logró comunicarse con ellos, pero un intenso deseo de vomitar le obligó a retroceder en ambas ocasiones. Sin embargo, no debía desistir...
[…] Por un instante, toda la ira que Hiden había estado tratando de contener afloró en su juvenil máscara; sus rasgos se descompusieron en una horrible mueca de rabia.
[…] Haciendo un nuevo esfuerzo, Martín logró vencer la resistencia que le mantenía apartado de la mente del viejo científico. Nunca, hasta entonces, había concentrado sus energías en el pensamiento de otra persona con tanta intensidad... Y, de repente, supo que lo había logrado.
ANA ALONSO Y JAVIER PELEGRÍN. La llave del tiempo. La torre y la isla.

Guía de lectura o actividades

A)    ¿Conoces alguna noticia referente a investigaciones para descubrir las capacidades de las personas? Hace poco se divulgó  en los medios de comunicación cómo una mujer, a la que se le habían aplicado unos electrodos, podía mover un robot sólo con la intención de su cerebro. ¿Qué te parece la idea de una máscara? ¿Qué más hechos curiosos podrían suceder o inventarse en un futuro no muy lejano? Piensa si eso forma parte de las capacidades desconocidas del ser humano.
B)    Pregunta a tu profesor de Física y Química  cómo funciona la energía y todo lo que se ha descubierto a raíz de la divulgación de las ideas de Einstein. ¿Te produce alguna sensación especial: mareo, rabia, miedo, alegría… tener todo ese conocimiento? ¿Por qué?

AGOSTO DE 2026.  Vendrán lluvias suaves.

 La voz del reloj cantó en la sala: tictac, las siete, hora de levantarse, hora de  levantarse, las siete, como si temiera que nadie se levantase. La casa estaba  desierta. El reloj continuó sonando, repitiendo y repitiendo llamadas en el vacío.  Las siete y nueve, hora del desayuno, ¡las siete y nueve! […]     
Las nueve y cuarto, cantó el reloj, la hora de la limpieza. 
De las guaridas de los muros, salieron disparados los ratones mecánicos. Las  habitaciones se poblaron de animalitos de limpieza, todos goma y metal.  Tropezaron con las sillas moviendo en círculos los abigotados patines, frotando las  alfombras y aspirando delicadamente el polvo oculto. Luego, como invasores  misteriosos, volvieron de sopetón a las cuevas. Los rosados ojos eléctricos se  apagaron. La casa estaba limpia.    
Las diez. El sol asomó por detrás de la lluvia. La casa se alzaba en una ciudad de  escombros y cenizas. Era la única que quedaba en pie. De noche, la ciudad en  ruinas emitía un resplandor radiactivo que podía verse desde kilómetros a la  redonda.   
 Las diez y cuarto. Los surtidores del jardín giraron en fuentes doradas llenando el  aire de la mañana con rocíos de luz. El agua golpeó las ventanas de vidrio y  descendió por las paredes carbonizadas del oeste, donde un fuego había quitado  la pintura blanca. La fachada del oeste era negra, salvo en cinco sitios. Aquí la  silueta pintada de blanco de un hombre que regaba el césped. Allí, como en una  fotografía, una mujer agachada recogía unas flores. Un poco más lejos -las  imágenes grabadas en la madera en un instante titánico-, un niño con las manos  levantadas; más arriba, la imagen de una pelota en el aire, y frente al niño, una  niña, con las manos en alto, preparada para atrapar una pelota que nunca acabó  de caer.
Quedaban esas cinco manchas de pintura: el hombre, la mujer, los niños,  la pelota. El resto era una fina capa de carbón.
La lluvia suave de los surtidores  cubrió el jardín con una luz en cascadas.    
Hasta este día, qué bien había guardado la casa su propia paz. Con qué cuidado  había preguntado. «¿Quién está ahí? ¿Cuál es el santo y seña?", y como los  zorros solitarios y los gatos plañideros no le respondieron, había cerrado  herméticamente persianas y puertas, con unas precauciones de solterona que  bordeaban la paranoia mecánica.      
Cualquier sonido  estremecía a aquella casa. Si un gorrión rozaba los vidrios, la persiana  chasqueaba y el pájaro huía, sobresaltado. No, ni siquiera un pájaro podía tocar la  casa.     
RAY BRADBURY. Crónicas marcianas. (Adaptación)

Guía de lectura o actividades

A)    Este fragmento del libro Crónicas marcianas de R. Bradbury fue escrito a mediados del siglo XX y describe una casa como las que se presentan hoy en día en las ferias que divulgan los avances informáticos. ¿Qué opinión te merece una persona que haya adivinado el futuro igual que hizo en su día Julio Verne con la llegada del hombre a la luna? Infórmate de los detalles coincidentes con su libro De la tierra a la luna.
B)    Intenta comprender por qué aparecen cinco manchas en la pared de esa casa que está rodeada de escombros y cenizas. ¿Qué sensaciones o emociones te produce descubrir lo que ha pasado?



Orientación didáctica

La escuela debe transmitir la idea de que aprobar o sacar buenas notas no significa tener éxito en la vida o ser mejor persona. Tiene que hacer saber a los alumnos, que también se aprende de los fracasos o derrotas y resulta absurdo querer ganar siempre. Nada más interesante al respecto, que estos fragmentos del libro de Andrés Barba que pueden animar a los interesados a conocer al escritor y su obra.

La maldición de ganar

Un niño de tres años se cayó a un pozo. Tuvo mucha suerte, porque en el fondo del pozo vivían los duendes Arapajoes, unos duendes pequeñísimos que van vestidos de indios, y estuvo viviendo con ellos durante cinco años, hasta que cumplió los ocho. Al principio se llevaba muy bien con los duendes Arapajoes, pero cuando creció echó de menos a su familia y les dijo que se quería marchar. Los duendes Arapajoes se enfadaron muchísimo y le echaron una maldición. El pequeño jefe de los duendes Arapajoes, que se llamaba Arapajito Allaquevoy, le dijo: «No nos puedes abandonar. Si nos abandonas te echaré una maldición para que estés obsesionado toda tu vida con batir récords del mundo. Vayas donde vayas nada te importará, sólo batir récords del mundo, y sólo podrás pensar en eso, y todas las cosas que no sean batir récords del mundo te importarán un pepino».
-Glop -hizo Juanito Tot.
-Glup -hizo Verónica Flut.
-«Y así te pasarás toda la vida», siguió diciéndole el jefe Arapajito Allaquevoy, «hasta que alguien bata un récord del mundo que tú no puedas batir. Cuando eso ocurra, la maldición Arapajoe terminará, y tú serás un hombre feliz». Eso fue lo que le dijo, así que ya sabéis por qué os ha llamado Klaus Wintermorgen; si conseguís batir un récord que él no pueda batir, la maldición terminará y por fin podrá ser un hombre feliz que no quiere batir récords del mundo constantemente.
La historia les encantó a Juanito Tot y a Verónica Flut, y a la vez les dio un poco de miedo.
-Ojalá seamos nosotros los dos seleccionados, me caes muy bien Juanito Tot -dijo Verónica Flut.
-Eso sería alucinante, me encanta batir récords -contestó Juanito.
Las pruebas fueron dificilísimas, y había una cola de 15.432 niños, de todos los colores, de todos los países. En la primera tanda (tiro de pelota lo más alto posible) fueron eliminados 9.567. En la segunda (aguantar cosquillas sin reírse) tuvieron que marcharse 3.673 (2.435 se hicieron pis de la risa nada más empezar). Las pruebas las organizaba el ayudante personal de Klaus Wintermorgen, cuyo nombre era Calzas Bancar Andras Sarratapa Fandargangan. Calzas era delgado como un palo, pero tenía el culo como una pera.
ANDRÉS BARBA. La alucinante historia de Juanito Tot y Verónica Flut.

Guía de lectura o actividades

A) Es evidente que en la vida no se puede ganar siempre como ocurre con Klaus, o no se puede ser el mejor en todo o sacar siempre dieces en los exámenes. En realidad, si uno tiene que estar pendiente de eso, acabará siendo bastante desdichado. ¿Has conocido a alguien que se enfade porque no gana o no le dan la razón en lo que piensa o dice? ¿Cómo te sentías a su lado?
B) ¿Crees que haces las cosas para ganar, quedar bien, contentar a tu familia o porque te gusta y disfrutas con eso? ¿Qué sentimientos te provoca ver los resultados de lo que emprendes, tengas éxito o fracases?



 El récord del amor

- Os he hecho venir a mi castillo por una razón. Os voy a enviar a un viaje para que intentéis batir un récord del mundo que yo no pueda batir. Estoy cansado de ganar siempre. Si conseguís batir un récord que yo no pueda batir os dejaré mi castillo durante un año para que hagáis en él las fiestas más grandes del mundo, pero si perdéis...[…]
- Verónica, se me acaba de ocurrir una cosa. A lo mejor hemos batido un récord del mundo sin darnos cuenta.
-¿Cuál?
-Es que me da un poco de vergüenza decirlo -confesó Juanito Tot.
-Dímelo, no tengas vergüenza.
-Pues que cuando te vi, desde el primer día, me gustaste muchísimo, Verónica Flut. Me gustaste tanto que me enamoré rapidísimo, en dos minutos, siete segundos, y a lo mejor esto es un récord del mundo, el del niño que más rápido se ha enamorado del mundo, y tal vez este récord no lo pueda batir Klaus Wintermorgen.
-¿Sabes qué, Juanito? Que a mí me pasó lo mismo, que te vi y en dos minutos, siete segundos, me enamoré de ti, y quería darte besos, y ser amiga tuya, y enamorarme como se enamoran mis hermanas mayores, que se enamoran muchísimo, constantemente, que nosotras las hermanas Flut somos famosas porque nos enamoramos todo el tiempo, y yo te vi tan pequeño y tan gracioso, y diciendo todo el rato «alucinante», y entonces me dije, pues hala, ya tengo novio.
Juanito Tot y Verónica Flut se dieron un beso, y se les pusieron las orejas rojas a los dos, tan rojas que se empezaron a reír. Pero su alegría duró poco tiempo.
ANDRÉS BARBA. La alucinante historia de Juanito Tot y Verónica Flut.

Guía de lectura o actividades

A)    Si uno piensa, hay multitud de experiencias en la vida que nos hacen únicos o nos colocarían en el podio de los récords más insólitos. ¿Te ha interesado alguna vez ganar algo por alguna razón especial? ¿Aprendiste algo con la experiencia?
B)    Escribe un texto en el que te quede claro  qué es lo que más desearías conseguir en tu vida y organiza un plan para conseguirlo. Revísalo a fin de curso y valora si ha merecido la pena el tiempo que has dedicado a luchar por tu plan y los resultados obtenidos.  Si te apetece, coméntalo con tu profesor o pídele ayuda.

Ganar al perder

-Soy el representante del libro de los récords del mundo, que traigo aquí mismo... -dijo Franck Ófono, mientras sacaba un libro con las tapas doradas-. Y desde el principio de esta historia me han interesado mucho las aventuras de Juanito Tot y Verónica Flut.
-Pues si las has seguido desde el principio -dijo Klaus Wintermorgen-, habrás descubierto que no han batido ningún récord que yo no pueda batir mucho mejor.
-No es verdad -contestó Franck Ófono-. Juanito Tot y Verónica Flut han batido sin darse cuenta un récord del mundo que tú no puedes batir, por eso les traigo aquí un diploma, y he escrito sus nombres en el libro de los récords.
-¿Y cuál es? -preguntaron sorprendidos Juanito Tot y Verónica Flut.
-Juanito Tot y Verónica Flut son los niños que más récords han intentado batir del mundo SIN CONSEGUIRLO. Y eso es un récord que tú no puedes batir, porque tú siempre lo consigues, Klaus Wintermorgen. Lo han intentado exactamente 438 veces, y nunca se han cansado de intentarlo, aunque nunca lo conseguían. Por eso al final lo han conseguido, aunque ni siquiera ellos mismos lo sabían.
ANDRÉS BARBA. La alucinante historia de Juanito Tot y Verónica Flut.

Guía de lectura o actividades

A) ¿Dirías que es importante el récord que consiguen Juanito y Verónica? Compáralo con lo que relataba Albert Espinosa en el capítulo anterior de que las pérdidas son ganancias. Razónalo.
B) El profesor puede contarte la historia de ciertos  inventores, escaladores,  exploradores… que se equivocaron muchas veces antes de conseguir sus objetivos. ¿Crees necesario el esfuerzo diario para conseguir las metas y el optimismo para buscar la parte positiva en cualquier decepción?

Orientación didáctica

Hay niños que tienen clara su vocación con ocho o diez años o incluso antes. Ya en casa o en la escuela muestran un gran interés por determinados asuntos y nadie les puede apartar eso de la cabeza. Los relatos de distintas culturas nos muestran personajes a los que se denomina verdaderos.  Si pensamos en ellos, tendremos una clara vocación de ser algo, una gran autenticidad en lo desempeñado. Les pueden servir de ejemplo. Seguramente, como los maestros, pusieron todo su corazón en desarrollar su personalidad.

Vocación de escritor

—Pero, tío, los libros enseñan cosas. Leyendo se aprende. Yo he aprendido mucho así.
—Sí, no lo dudo, tú has aprendido mucho leyendo en una habitación de tu casa, encima de tu cama, bajo la luz de una lámpara eléctrica. Yo he aprendido mucho también viviendo aquí, en la selva, en el mundo abierto, bajo la luz natural del sol. Son dos maneras de aprender y de vivir. Tú eliges una, yo elijo la otra. No pasa nada. No tenemos por qué hacer lo mismo, ¿no te parece?
—Pero, ¿nunca has leído ningún libro de verdad, ninguna novela? —seguí preguntando, extrañado todavía y pensando que quizás mi madre tenía razón cuando decía que Sebastián era un salvaje del tipo de Tarzán, que tampoco conocía a Gutenberg.
—Sí, sí, he leído un par de novelas por compromiso con quien las escribió, que me las regaló y no me quedó otro remedio que tragármelas. Tardé meses, eso sí, pero lo hice.
Sebastián era una caja de sorpresas: no leía, pero resultaba que conocía al menos a un escritor.
—¿Te las regaló quien las escribió? ¿Conoces a algún autor de novelas? Me lo tienes que presentar. Quiero conocerlo. Siempre he querido conocer a algún escritor. Lo harás, ¿verdad? Yo de mayor quiero ser escritor y escribir sobre África.
—Tienes mucho que vivir y experimentar para poder escribir sobre África o sobre cualquier cosa —replicó con un tono escéptico—. No es tan fácil como crees. Y... sí, conozco a alguien que escribe.
—¿A quién? ¿A alguien famoso? —Yo todavía entonces me dejaba deslumbrar por todo aquello que salía en la tele.
—¡Oh, Benja! ¡No seas tan pesado! No quieras saber todo el primer día, ¿eh? Poco a poco irás descubriendo y conociendo las cosas que te rodean. No querrás escribir el libro de tu vida en una sola tarde, ¿no? Además, es hora de descansar, tienes que estar cansado.
[…]Me iba dando cuenta de que Sebastián tenía razón casi siempre. Era una persona sabia, aunque no hubiera leído mucho. Entonces recordé que cuando me presentó a Henri me había dicho de él que era un hombre sabio, y yo estaba seguro de que Henri tampoco era un gran lector de libros. Entonces empecé a comprender que se podía ser sabio sin ser lo que llamamos un intelectual y ser un perfecto zoquete habiendo leído toda la Biblioteca Nacional. Seguramente, la sabiduría nacía de reflexionar y de vivir, en el verdadero sentido de ambas palabras.
En cualquier caso, aquella noche en la cama de mi padre y rodeado de sus cosas, cogí mi libro de Simenon que en el avión no había conseguido ni abrir, y me lo leí de una sentada, como siempre hacía con los misteriosos casos del inspector Maigret.
ANA ALCOLEA. El medallón perdido.

Vocació Nº 16

Un veí meu destarifat
que és, per ofici, malfeiner,
una vesprada al seu terrat
va desitjar ser dolçainer.
Una xicota carassera
que netejava un galliner,
bé va guaitar, per ravalera,
el joc d´aquell manifasser.[…]
Que fas al terrat,
rovellat?
No tens res que fer
malfeiner?
Mira quin canut
més menut!
I encara vols ser
dolçainer?
Que t´ha paregut Pasquala?
Xiula-li, que és guatla!
Aquell xicot destarifat
que era demés, desvergonyit,
no se´n va anar del seu terrat
com perticava, avergonyit [...]
MIQUEL PERIS SEGARRA. Antologia Literària.  Fragmento del poema nº 16.

¡Teatro, teatro! Falta el teatro

Viendo actuar a Chama me juré que, cuando fuese mayor y tan alta como ella, me dedicaría al teatro o a algo que se le pareciese. Deslumbraría a las multitudes árabes que me contemplarían pulcramente sentadas en hileras y les explicaría qué significaba ser una mujer embriagada de sueños en una tierra que aplasta tanto los sueños como a quien sueña. Les haría lamentar las oportunidades desperdiciadas, los cautiverios absurdos, las ilusiones destrozadas. Y entonces, cuando estuvieran en la misma longitud de onda que yo, cantaría los prodigios de la exploración personal y la emoción que provocan los arriesgados saltos a lo desconocido.

Oh, sí, les hablaría de los imposibles, de un mundo
árabe nuevo en que hombres y mujeres
pudieran abrazarse y bailaran sin miedo y sin
barreras que los separasen.
Oh, sí, encantaría a mi público y, con palabras
mágicas y gestos estudiados, como Asmahan y Chama
antes que yo, recrearía un planeta
sereno en que las casas no tuvieran puertas y las
ventanas se abriesen de par en par a las calles
seguras.
Les ayudaría a caminar en un mundo en que la
diferencia no precisara velos y donde los
cuerpos de las mujeres se movieran con
naturalidad y sus deseos no crearan angustia.
Crearía para y con el público largos poemas sobre la
ausencia de miedo…
FATEMA MERNISSI. Sueños en el umbral.

Guía de lectura o actividades

A) ¿Ya sabes lo que quieres ser el día de mañana como los protagonistas de los textos anteriores?
¿Has tenido clara tu vocación desde pequeño? ¿Quién o qué crees que te influyó? ¿Has comenzado a hacer algo al respecto?
B) ¿Quieres conseguir las cosas inmediatamente o sabes tener paciencia?
C) ¿Te resultan pesadas las opiniones o consejos de tus padres y profesores. Razónalo.

Orientación didáctica

Corresponde el turno a los Personajes de verdad. Este requisito es esencial para algo. En ocasiones, uno sólo puede casarse con alguien de este tipo, otras veces, sólo ese ser especial puede conseguir un objetivo: salvar una vida... Bastan tres ejemplos distintos para constatar su peculiaridad.

La princesa y el guisante

Había una vez un príncipe que quería casarse con una princesa, pero tenía que ser una princesa de verdad. Así que recorrió el mundo entero en busca de una que lo fuera, pero cada vez que conocía a alguna princesa le encontraba algún defecto. Y no es que no hubiera bastantes princesas, pero ¿lo eran de verdad? Ése era el problema. Siempre les veía algún inconveniente. Así que regresó a su reino muy desconsolado, porque lo único que deseaba en el mundo era casarse con una princesa de verdad.
Una noche estalló una tormenta horrible. Relampagueaban los rayos, retumbaban los truenos y llovía a cántaros: ¡hacía una noche espantosa! De pronto alguien llamó a la puerta de la ciudad, y el viejo rey fue a abrir. Afuera aguardaba una princesa, pero, ¡Dios mío, qué mal aspecto tenía con aquel aguacero y aquel tiempo terrible! El agua le chorreaba del pelo y de la ropa, le corría hasta la punta de los zapatos y le salía por los talones, y, sin embargo, la joven decía que era una princesa de verdad.
«Bueno, no tardaremos en comprobar si lo que dice es cierto», pensó la vieja reina y, sin decir una sola palabra, se dirigió al dormitorio, apartó toda la ropa de cama y el colchón y puso un guisante en la base de la cama. Después colocó veinte colchones encima del guisante y otros veinte edredones encima de los colchones. Ésa era la cama donde la princesa iba a dormir aquella noche.
A la mañana siguiente le preguntaron cómo había dormido.
—¡Oh, he dormido terriblemente mal! —dijo—. A duras penas he pegado ojo en toda la noche. ¡Sólo Dios sabe lo que había en esa cama! Estaba acostada sobre algo tan duro que tengo todo el cuerpo lleno de moratones. ¡Ha sido horrible!
Y así es como pudieron comprobar que era una princesa de verdad, porque a través de veinte colchones y veinte edredones había notado el guisante. Sólo una princesa de verdad podía tener una piel tan delicada.
El príncipe la tomó por esposa porque sabía que había dado con una princesa auténtica, y el guisante fue expuesto en el Museo Real, donde todavía puede verse, si es que nadie lo ha robado.
Y esta historia, como la princesa, sí que es de verdad.
HANS CHRISTIAN ANDERSEN. La princesa y el guisante  

Guía de lectura o actividades

A)    ¿Crees que sólo podrías amar a alguien que reuniera una cualidad que te parezca imprescindible?
B)    ¿Conoces a gente que exija a los otros un comportamiento determinado para seguir siendo queridos? Si eso te parece adecuado, razona el porqué.

 Tizón de Maíz

La invitó a entrar y sentarse, y le preguntó qué deseaba.
«He venido por ti», dijo ella.
«Muy bien», contestó el joven. Tomó un poco de harina y la lanzó contra la concha, y se quedó pegada a ella. «Muy bien», dijo. «He dado mi palabra. He aceptado casarme con la muchacha cuya harina se pegara a mi concha, y tu harina lo ha hecho. Por lo tanto, iré contigo. Viviré en tu casa y seré tu esposo.» Así pues, se fueron a la casa de Tizón de Maíz.
Sus hermanos y su madre estaban sorprendidos. Y también complacidos. Sin embargo, al anochecer, la muchacha entró en una habitación contigua y no volvió a salir. Entonces, inesperadamente, de la misma habitación salió una bella joven, y Muchacho del Arco Iris se preguntó quién podía ser.
Cuando se acercó la hora de acostarse, los hermanos empezaron a hablar con la muchacha como si nada raro hubiera ocurrido, y el muchacho comprendió entonces que la hermosa joven no era otra que la hermana de ellos y su novia. Su aspecto sucio era debido a una máscara que llevaba durante el día, pero por la noche revelaba su verdadero yo.
Las otras jóvenes, las que habían sido rechazadas, estaban furiosas.
EDWARD S. CURTIS. Cómo se salvó el mundo y otros cuentos. Indios del sudoeste. La novia sucia.

Guía de lectura o actividades

A)    Has constatado alguna vez que una persona que te pareció desagradable o poco atractiva, te resultara, más adelante simpática, guapa o llena de cualidades?  ¿A qué te parece que responde esa situación? ¿Estarías de acuerdo con el refrán o frase hecha: “las apariencias engañan?
B)    ¿Valoras más el físico de la gente y te dejas llevar por una primera impresión o intentas conocer a las personas un poco más para averiguar si te agradan o no?

El ruiseñor de verdad

Y el palacio estaba en silencio, un silencio espantoso.   En ese mismo instante se oyó, junto a la ventana, un canto  hermosísimo: era el pequeño ruiseñor de verdad, que estaba allí  afuera, posado sobre una rama. Había oído  hablar de la enfermedad del emperador,  y había venido a traerle consuelo y  esperanza. Y a medida que cantaba,  las cabezas de los cortinajes iban  desvaneciéndose, la sangre empezó  a circular con más fuerza por los  débiles miembros del emperador y   hasta la misma Muerte se puso a escuchar y decía:
 -¡Sigue, pequeño ruiseñor, sigue! 
-¡Lo haré si me entregas el espléndido sable de oro, el magnífico estandarte y la corona imperial! -dijo el ruiseñor. 
Y la Muerte le entregó cada una de esas joyas a cambio de  una canción, y el ruiseñor siguió cantando, y cantó sobre el silencioso cementerio donde crecen rosas blancas, donde el saúco  desprende su aroma y donde la fresca hierba se humedece con  las lágrimas de los que visitan a sus seres queridos. Y la Muerte  sintió tanta añoranza de su jardín que salió volando por la ventana, como una fría y blanca neblina.
 -¡Gracias, muchas gracias! -suspiró el emperador- ¡Sé  quién eres, divino pajarillo! Te expulsé de mi tierra y de mi imperio, y, a pesar de ello, has venido a cantar para mí y con tu  canto has alejado de mi cama esos funestos fantasmas y has arrojado a la Muerte de mi corazón. ¿Cómo podré recompensarte?
HANS CHRISTIAN ANDERSEN. El ruiseñor y otros cuentos.

Guía de lectura o actividades
 
A) ¿Has intentado observar lo que de veras agrada a tu corazón y tiene que ver con lo verdadero o la imitación; por ejemplo: Una relación por internet con un amigo o una amistad cercana, una película de animales o el contacto con ellos, una flor artificial o el aroma de esa misma flor en el campo…?
B) ¿Te parece que el canto del ruiseñor es más valioso que el oro o la corona de un rey y puede devolver la vida a un moribundo?
C)Valora si  las relaciones humanas que mantienes con las personas que te rodean y lo que compartes con ellas o te transmiten,  te dan la fuerza necesaria para ser feliz y perseguir tus objetivos o son relaciones  superficiales, artificiales, hipócritas o falsas.

Orientación didáctica

Para terminar con este capítulo, el alumno leerá repetidas veces estos dos poemas que mantienen un cierto misterio y le pediremos que imagine la historia de los personajes de los que se habla y escriba una página de su diario. Lógicamente, habrá que descifrar el vocabulario desconocido y captar las metáforas ahí presentes.

Querida Gacela blanca:

Aun cuando sean estas las últimas palabras
que podamos compartir,
sé tan fuerte y flexible como el junco,
jamás se quiebra.
Verás: Nada que se crea, se destruye por completo.
Es más fuerte el vínculo del amor, que el de la vida,
y mucho más solidario que todos los Imperios juntos.
Las raíces, el pensamiento, la razón,
la convicciones y las creencias,
son esferas de pausados giros
de un futuro puesto en marcha ya.
Por favor, cuando ejecuten la sentencia,
mirad dentro de vuestro corazón,
pues ahí me hallaréis siempre.
Oh, pequeña, dulce y cristalina gacela,
manantial que das vida, es tan grande
y tan profundo nuestro amor como la distancia,
que también nos une. Shaloom.
ISRAEL PÉREZ. “Querida Gacela blanca”.Original manuscrito en ladino. N.A. Revista La Séptima Espiral 2007.

Magos del sueño
A mis treinta y seis párvulos

Hijos de mis horas, retoños, aprendices de hombre;
amanece mi alma con vuestras risas locas.
Inocentes luciérnagas deletreando sílabas,
inventores de la imagen, magos del sueño.

Vuestras miradas forjan una primavera blanca
en mi corazón de sombra, en mis ojos tristes[…] 

Sois embriones de la esperanza, de la luz cierta.
Lleváis en vuestras voces la alegría del olivo,
el asombro del capullo, el ritmo de las mariposas;
mendigo soy de vuestra esperanza encarnecida.

Alargáis vuestras frágiles manos hasta mi noche,
me acariciáis la sonrisa olvidada, la ternura
sin oficio. Y con vosotros dejo de ser esta nada
para ser ángel azul con vuestra dicha. […] 

Regresáis a vuestras casas y quedo con mi soledad,
con la horrible bofetada de la soledad otra vez,
con una mueca de desesperanza como si fuera
el horrible bosquejo de un hombre en su tragedia.

Duendecillos del aula, tropel de alondras, cuerpos
alados de mimbre, abejas de mis tuétanos;
Mayo se hace dulce con vuestros juegos,
con vuestras canciones que son pájaros de sangre.

Sabéis del lenguaje puro de las montañas,
enseñádmelo. Sólo sé de cifras, de llanto.
Soy un manojo de amargura, de silencio,
de raíz de golpes, de sed gota a gota sacudida.
 JOSÉ TUVILLA

Guía de lectura o actividades

A)    Memoriza un fragmento de uno de los dos poemas, elige una música especial para acompañarlo y prepárate para recitarlo  en la semana cultural de tu centro.

B)    Escribe en tu diario sobre uno de los protagonistas de estas historias y los sentimientos o emociones que te sugieren.